viernes, 11 de marzo de 2016

11-M de 2016. Un paseo con lágrimas en el corazón.

Como todos los 11-M los madrileños en particular y los españoles en general tenemos esa sensación de dolor y tristeza que desde aquel infame día once de marzo de dos mil cuatro daña nuestras vidas.

A modo de homenaje particular, con un maravilloso y soleado día madrileño, he dado un pequeño paseo -grande para los recuerdos- desde la placa conmemorativa situada en la Puerta del Sol hasta el Bosque del Recuerdo de nuestro mítico parque de El Retiro.

Placa de agradecimiento en la Puerta del Sol, en la fachada de la Sede de la Presidencia de Comunidad de Madrid (antigua Casa de Correos) hoy con una corona por los actos celebrados a primera hora.
El lugar de inicio del paseo ha sido frente a la placa de agradecimiento al pueblo de Madrid por su apoyo y auxilio en tan triste fecha así como al recuerdo de las víctimas.

Un trayecto escogido con la, en mi opinión, mejor simbología posible para la fecha de referencia.

Desde la Puerta del Sol a la Carrera de San Jerónimo, para pasear frente al Congreso de lo Diputados, hoy en día el mayor símbolo de la Democracia Española -no siempre ha sido así-.

Llegando a un Neptuno mucho más triste que otros días, el paso siguiente es por la Plaza de la Lealtad, donde está situado el Monumento a los Caídos por España. Monumento inaugurado el 2 de mayo de 1840 con el nombre Obelisco o Monumento a los Héroes del Dos de Mayo, nombre que conservó hasta 1985 en que fue cambiado a su denominación actual.

Monumento erigido en memoria de los héroes del dos de mayo de 1808, situado en el mismo sitio donde tuvieron lugar los fusilamientos posteriores al alzamiento del pueblo de Madrid contra la tiranía.

Un monumento regado con sangre de patriotas que frecuentemente se le conoce como Tumba del soldado desconocido.

Y desde la Plaza de la Lealtad hasta el Parque de EL Retiro, entrando, como no podía ser de otra manera, por la Puerta de España. En opinión de ESdN la más bonita y elegante de cuantas puertas de acceso tiene el maravilloso parque madrileño.

Y hacia la derecha, cruzando el Parterre, llegamos al Bosque del Recuerdo.

Bosque del Recuero, vista frontal.
Leyenda conmemorativa en la ribera de un pequeño río artificial que rodea el Bosque.
El Bosque del recuerdo es un monumento construido como homenaje a las 191 víctimas que fallecieron en los atentados de los trenes de cercanías en Madrid el 11 de marzo de 2004 y al agente de las fuerzas especiales fallecido con posterioridad en el suicidio colectivo sucedido en Leganés (total 192 fallecidos).

El monumento consta de 192 árboles -uno por cada víctima-, 170 cipreses y 22 olivos dispuestos en sus 118 hectáreas de superficie.

Subiendo por el interior del Bosque.


Flores incrustadas en los cipreses colocadas por los visitantes en el aniversario de los atentados.

Llegando al centro del Bosque del Recuerdo.

En el mismo centro del Bosque, los familiares no olvidan y rinden homenaje a sus familiares: podemos leer:"El mundo no es tan hermoso desde que te fuiste. Ni olvido, ni perdón. Te queremos Lola. 11 - marzo"
Y
"Hace doce años que perdimos a nuestros queridos hijos, amigos y hermanos. Andrián Andrianov y Kalina Vasileva. La pareja búlgara tenía pensado casarse en el mes de mayo, unos meses más tarde del atentado"

El centro del monumento y su punto de mayor altitud, tres cipreses con fotos de víctimas en su base y muchísimas flores colocadas por los visitantes.

Terminada la visita, no sólo se deja atrás un monumento; se queda el recuerdo y la memoria del horror y el dolor.

Entre las muchas sensaciones que produce el recuerdo de los atentados del 11-M su más pura manifestación son la lágrimas.

Lágrimas de dolor, lágrimas en el corazón de Madrid, lágrimas en el corazón de España, lágrimas en el corazón de la humanidad, lágrimas de impotencia, lágrimas de pasión, lágrimas de amor, lágrimas de sangre, lágrimas de rabia y lágrimas de recuerdo.

Lagrimas que no olvidan. Lágrimas que no perdonan.

Dedicado a los más de 2.000 afectados directamente (192 fallecidos y más de 1.820 con graves secuelas) por los atentados ocurridos en Madrid el 11 de marzo de 2004.


Muchas gracias por tu visita.

Felipe Ramos.
El Sombrero de Nosferatu.
ESdN.

1 comentario:

  1. Enhorabuena por el paseo y por las explicaciones. Hace 13 años amanecimos en un Madrid ensangrentado, pero solidario.

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